En el marco de la segunda edición del encuentro sobre la ruralidad de la Universidad de Chile, la comunidad estudiantil pudo visitar la ciudad de San Felipe, para conocer de la voz de sus habitantes, los desafíos actuales y futuros que enfrenta el mundo campesino en el país.
Por Javiera Romero Rodríguez, comunicaciones Programa Transdisciplinario en Medio Ambiente Uchile
La segunda jornada de la Semana Campesina 2024, se realizó en el Centro Cultural El Almendral de San Felipe, teniendo como anfitriona a la Corporación Ambiental CIEM Aconcagua. Las actividades de este día, contemplaron intercambios de saberes con actores del mundo campesino y del ámbito académico, y se realizaron tanto al interior del centro, como en terreno.
Para comenzar el día, se llevó a cabo el conversatorio “Intercambio de saberes: Agua, sociedad y los desafíos de las cuencas”, en el que participaron Claudio Tapia, Presidente de la Cooperativa de Agua Potable Rural (APR) de Los Patos, Putaendo; María Christina Fragkou, geógrafa y coordinadora académica del Programa Transdisciplinario en Medio Ambiente de la Universidad de Chile (PROMA); Bernardo Reyes, Ecólogo; Raúl Iturrieta, Presidente de la Asociación de Pequeños Agricultores del Valle del Aconcagua; y Jorge Razeto, antropólogo y académico de la Universidad de Chile, y director de CIEM Aconcagua, quien moderó el diálogo.
Durante la jornada de la tarde, el público asistente, compuesto por estudiantes de pregrado y postgrado de diversas facultades de la casa de estudios y vecinas y vecinos de la ciudad de San Felipe, visitaron la propiedad de un campesino, ubicado en la localidad de El Almendral; para luego realizar una caminata al cerro isla del mismo nombre, en el que se pudo apreciar la geografía del valle, que es protagonizada por la cordillera de los Andes y el Río Aconcagua.
La asociatividad y la diversidad ante la escasez hídrica
A través de los dos conversatorios que se enfocaron en el intercambio de saberes, la jornada permitió conocer las soluciones que las comunidades rurales de Putaendo han encontrado para hacer frente a la realidad de la zona, tras la larga sequía que afectó a la comuna desde el 2014, y su impacto en la producción agrícola.
“Hasta hace unos años, las APR que componen la cooperativa estaban trabajando con aguas superficiales, y eso llevaba problemas de turbiedad y crecidas de río, así que teníamos que trabajar con camiones de aljibe”, contó el representante de la comunidad rural de Los Patos de Putaendo. “Por eso, formamos una cooperativa, postulamos a varios proyectos que en este momento se están ejecutando. También tuvimos la gran oportunidad de optar a un pozo profundo. Ahora ya no tenemos turbiedad y si hay crecida de río, nosotros estamos tranquilos”, contó.
Por su parte, Iturrieta, relató la iniciativa que impulsaron los agricultores del Aconcagua, específicamente de la comuna de Putaendo, para lograr la construcción del embalse Chacrillas, tras un largo período de escasez hídrica para sus cultivos. “De eso fue capaz una comuna y sus organizaciones: de poder torcer la mano al Estado”, señaló. Esta fuente de agua se construyó en 2018 y hoy abastece a la agricultura familiar campesina de la zona.
Asimismo, el Presidente de la Asociación de Pequeños Agricultores del Aconcagua, comentó que, pese a los tiempos de escasez hídrica, la vida campesina en la zona se mantuvo, debido a su naturaleza. “Esa es una de las potencialidades, una de las capacidades que tiene la agricultura, su diversidad productiva es su fortaleza. O sea, una agricultora tiene esto, tiene lo otro. Hoy día, el turismo rural, la artesanía, la compra-venta de alimentos”, comentó.
Los desafíos de las zonas agrícolas
Por su parte, otro de los temas que se pudieron relevar en esta jornada de la Semana Campesina 2024, fueron los abruptos cambios de uso de suelo que están teniendo las zonas agrícolas en el país. Esta temática se desarrolló durante el “Intercambio de saberes: Sistema Alimentario Local”, que se realizó en el campo de un vecino del sector El Almendral.
“La principal amenaza que tiene el campo chileno es el factor climático y el cemento, como le digo yo. Que cada vez nos van metiendo más cemento a las tierras que son para cultivo”, opinó Luis Francisco Puebla, agricultor, comerciante y vecino asistente a la jornada.
“En esta división de la tierra con el agua, los territorios también se transforman en mercancías transables, en donde el alimento es lo último que entra en la discusión”, señaló Daniela Gac, académica Facultad de Cs. Agronómicas al respecto, contando al público asistente el caso de Catemu, comuna en que el 20% de su tierra cultivable está siendo amenazada por un proyecto de instalación de paneles fotovoltaicos.
Rol de la Universidad de Chile
La académica María Christina Fragkou, representando PROMA, enfatizó la importancia de los intercambios de saberes, para permitir un diálogo horizontal entre la academia y el conocimiento local. “La transdisciplina tiene que ver con incorporar también el conocimiento local en lo que estamos haciendo y el conocimiento que estamos produciendo desde las universidades”, señaló Fragkou.
Iván Cano, coordinador ejecutivo de la Cátedra Campesina y Alimentación de la casa de estudios, señaló la importancia de mantener la relación de la academia con las necesidades territoriales.
“La universidad de Chile tiene que responder a las necesidades de todo el país. Y dentro de eso, los sectores que han sido más vulnerables son las poblaciones campesinas (…) No solamente llegar con innovaciones, con propuestas, con herramientas nuevas para la adversidad del cambio climático, sino que también para trabajar estos desafíos desde la colaboración con los conocimientos locales”, concluyó.